Chequeo de 14 puntos por errores que dañarán su liderazgo

Nos encanta este articulo escrito por Dan Reiland porque se trata de tantas características de una iglesia Génesis. ¿Cuántas características puedes identificar?

Photo by Pixabay from Pexels

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Acabo de completar mi examen físico anual.

Pasar por el proceso de un chequeo completo de pies a cabeza no es muy divertido, pero es algo inteligente. Mi doctor es excelente y muy minucioso. Comienza con mis signos vitales, realiza análisis de sangre extensos y luego verifica las cosas que podrían indicar un problema de salud.

Es una buena idea hacer lo mismo que un líder. Es mejor concentrarse en las cosas positivas que fortalecerán tu liderazgo, pero también es inteligente comparar sus hábitos con una lista de cosas que podrían lastimarlo a largo plazo.

El liderazgo no es fácil, pero es uno de los esfuerzos más gratificantes imaginables. El liderazgo es más arte que ciencia, más fluido que estructurado y más desordenado que limpio. Por lo tanto, cualquier ayuda que podamos obtener para un chequeo rápido es útil.

Eso es lo que he escrito para ti aquí. Probablemente podría enumerar 25 cosas, pero estas 14 están en la parte superior y son un buen lugar para comenzar.

• ¿Cuáles estás haciendo bien?

• ¿Cuáles necesitan mejoras?

• ¿Qué tal el líder que entrenas?

Puede llevarlos a través de esto como una herramienta de desarrollo. Deja que se evalúen a sí mismos, y luego haz preguntas que conduzcan a ofrecer ideas e ideas para ayudarlos a mejorar.

Control de liderazgo de 14 puntos:

(Estas cosas dañarán tu liderazgo si las haces repetidamente con el tiempo).

1) Pensar  en pequeño

Los pensamientos negativos, sentirse esposado o sin poder y evitar el riesgo son formas de pensamiento pequeño. Hay tantas agendas en competencia, voces que deben escucharse y expectativas aparentemente no negociables que, cuando se mezclan con recursos limitados y energía finita, es fácil caer presa del pensamiento pequeño.

A veces me encuentro rezando en grande pero luego en pequeño, eso solo sucede cuando pienso en pequeño. Lo mismo puede ser cierto para ti. Ora en grande, piensa en grande, lleva en grande.

• ¿En qué área o circunstancia estás más tentado a pensar en pequeño?

2) Saltando a conclusiones

Rápido es la nueva normalidad, y demasiado rápido puede meterte en problemas. Siempre hay otro lado de la historia. Siempre. Tómate el tiempo para conocer los hechos. A veces solo (literalmente) contar hasta cinco antes de decir algo, o presionar enviar puede mantenerlo fuera del agua caliente. En otras situaciones, pueden ser necesarios algunos días.

Si alguien presiona tus botones, no reacciones en exceso. En cambio, cuando sienta que su temperatura aumenta, disminuya intencionalmente una muesca. Es mucho más fácil responder con sabiduría cuando el pie no está en la boca.

• ¿Siempre te tomas el tiempo para escuchar el otro lado de la historia?

• ¿Puedes resistirte a hablar o reaccionar demasiado rápido?

• ¿Te encuentras interrumpiendo a otros cuando están hablando?

3) Resistiendo el cambio

Tú sabes que resistir el cambio es un mal uso de tu tiempo y energía tanto personal como profesionalmente. Si no cambias, no puedes crecer. Y si no innova sus ministerios para mantenerse al día con los cambios en la cultura, tu ministerio se atascará.

• ¿Cuál es el último cambio personal que realizaste y al que te adaptaste con éxito?

• ¿Cuál fue tu cambio más reciente en cómo opera un ministerio en particular?

4) Evitar riesgos

Es posible evitar el riesgo, pero no puedes liderar y escapar del riesgo al mismo tiempo. Es imposible proyectar visión y progresar sin tomar algunos riesgos. Puede ser un gran proyecto o una conversación difícil. No necesitas dar un salto tonto y ciego de fe, pero nunca sabrá completamente el futuro; por lo tanto, se requiere riesgo. ¡Ora, confía en Dios, planifica y dirige!

• ¿Existe algún riesgo que estés evitando?

• ¿Cuál es el riesgo actual que estás tomando?

5) Comenzando pero no terminando

Te contaré un pequeño secreto, no terminar lo que comienzas frustra a las personas con las que trabajas y lideras. Ser emprendedor y tomar la iniciativa es bueno, pero no si no terminas. Si haces esto con suficiente frecuencia, puede comenzar a reflejarse en tu personaje.

Si tienes demasiados proyectos inacabados, es mejor priorizarlos y dejar que tu equipo sepa cuáles va a matar para que puedas terminar los más importantes.

• ¿Qué importante proyecto inacabado necesitas terminar?

6) Olvidando la amabilidad

Cuanto más tiempo dirijo, más veo la importancia de la consistencia en la amabilidad. La bondad de muchas maneras representa el corazón de Dios. Sí, los líderes deben ser fuertes y decisivos, pero eso no impide tratar a las personas con un espíritu amable. Dios se deleita en la bondad (Jeremías 9:24).

En otra publicación dedicada a este tema, escribí: “La amabilidad es una cualidad humana esencial que permite que tenga lugar la confianza, la conexión y el intercambio genuino. La amabilidad trae paz y alegría a situaciones llenas de presión. La amabilidad no es una idea nueva, pero a menudo no se desarrolla como un rasgo de liderazgo”.

• ¿Te evaluaría la gente como un líder amable?

7) Demasiado ocupado para no orar

Sé que quieres orar, y si tienes una vida de oración fuerte, ¡genial!

Si tu vida de oración no es lo que te gustaría que fuera, comienza preguntándote qué te impide orar. Haz tu mejor esfuerzo para superar el bloqueo. El mejor remedio es comenzar de a poco. Toma acción rezando una breve oración cada día y construye desde allí.

No te desanimes ni cargues con la culpa, disfrute de unos minutos de oración al día y deja que se acumule la cantidad de tiempo. Dios no tiene un marcador en ti; Solo quiere pasar tiempo contigo.

• ¿Estás satisfecho con tu vida de oración?

• ¿Qué cambio simple podrías hacer para que la oración sea más parte de tu vida, en lugar de otra cosa en tu lista de tareas?

8) Sub-priorizar el desarrollo de líderes

Pocas cosas son más importantes que desarrollar líderes en tu iglesia. De hecho, junto al poder de la oración y la salvación de las personas, no estoy seguro de que algo sea más importante. Independientemente de dónde clasifique el desarrollo del liderazgo, estoy seguro de que sabe que es esencial darse cuenta de la visión que Dios le ha dado para tu iglesia.

• ¿Tienes un plan en acción para desarrollar nuevos líderes?

9) Soñando en grande, pero ejecutando en pequeño

Esto no se refiere a "todos hablan sin acción", eso no es un error de liderazgo común. Sin embargo, comunicar grandes sueños sin crear planes y estrategias acordes es común. Eso siempre resulta en una ejecución pobre o limitada. No necesitas reducir tus sueños, pero asegúrate de crear planes que puedan acomodar tus sueños.

• ¿Tienes un buen plan estratégico en su lugar?

10) Liderar con una mentalidad de escasez

Los mejores líderes son líderes generosos.

No tienen miedo de "quedarse sin", descubren cómo "hacer más".

Esta idea no implica un modelo descuidado de mayordomía. Reconoce tanto la capacidad de ser inteligente con lo que tiene como la capacidad de que tu y Dios juntos brinden más. El alcance no se limita al dinero o al mundo material, sino que incluye una mayor amplitud desde el fruto del espíritu hasta una naturaleza desinteresada. En esencia, se trata de un espíritu generoso.

• ¿Te ves inclinado más hacia una mentalidad de escasez o una mentalidad de abundancia?

 

11) Exprimirlo (hacer algo sin planificar) en lugar de estar completamente preparado

Si estuviéramos en una sala de líderes de la iglesia y el orador preguntara; "¿Quién aquí ha sucumbido alguna vez a" volar "en una reunión o al dar una charla?" Todas las manos se levantarían. Sucede, pero es algo imprudente repetir y te alcanzará con el tiempo y dañará tu liderazgo.

La preparación es una de esas disciplinas detrás de escena que es esencial para un gran liderazgo. Sinceramente, no conozco a un gran líder que haya liderado bien durante décadas, que no se prepare de manera consistente y diligente para todo lo que hacen.

• ¿Tus colegas te verían como un líder que constantemente se prepara bien?

 

12) Juicios, resentimiento o rencor

Sabemos que juzgar, el resentimiento y los rencores van en contra del núcleo del evangelio (gracia y perdón), sin embargo, aún encuentran su camino en los corazones y las vidas de algunos de los mejores líderes.

Los caminos más comunes son cosas como dolor, agotamiento, inseguridad profunda, celos o un espíritu crítico. Si luchas aquí, esto puede requerir más que la determinación humana de cambiar. La oración y la sabiduría de un buen consejero pueden ser beneficiosas.

• ¿En qué circunstancias estás más tentado a juzgar, resentir o guardar rencor?

• ¿Cómo superas mejor esa tentación?

 

13) Ya no estoy aprendiendo

Los líderes son aprendices; son aprendices de por vida. La forma más rápida de irrelevancia como líder es dejar de aprender. Mi amigo y mentor John Maxwell ha liderado ahora durante unos cincuenta años y hasta el día de hoy es un estudiante feroz. Cada vez que enviamos mensajes de texto o hablamos, John menciona algo que está aprendiendo, un libro que está leyendo o una nueva idea en la que está pensando.

• ¿Eres un estudiante de corazón?

• ¿Qué has aprendido recientemente?

 

14) Operando sin margen (tiempo no programado)

Este es uno de los errores en la lista de verificación en los que necesito trabajar. Decir que sí es aparentemente un regalo espiritual para mí, y necesito decir no más a menudo, crear margen y concentrarme mejor en mis prioridades más productivas. ¿Qué hay de tí?

 

Admiro a los líderes que conozco que están centrados en el láser, incluso cuando me dicen que no. No me gusta su no, pero lo entiendo. El margen es necesario para cuidar tu alma, descansar y disfrutar la vida. Se requiere margen para estar en tu mejor momento y hacerlo lo mejor posible.

• ¿Qué área de tu vida necesita más margen?

¿Entonces, cómo lo hiciste?

¿Hay dos o tres en los que necesitas trabajar en los próximos meses? No hagas tu lista más larga que eso. Simplemente aborda entre uno y tres a la vez.

 

Dan Reiland es el pastor ejecutivo de la Iglesia 12 Rocas en Lawrenceville, Georgia. Anteriormente se asoció con John Maxwell durante 20 años, primero como Pastor Ejecutivo en la Iglesia Wesleyana Skyline en San Diego, luego como Vicepresidente de Liderazgo y Desarrollo de la Iglesia en INJOY.

© 2019 Dan Reiland | El entrenador del pastor - Desarrollando líderes de la iglesia.

Articulo original escrito en inglés: https://danreiland.com/14-point-check-up-for-mistakes-that-will-hurt-your-leadership/

 

Traducido por: Yadira Morales