Estos son algunos aspectos básicos que deben incluirse en el momento de cuidar integralmente a los misioneros por parte de la iglesia que les envía, pues es un trabajo que se logra en equipo y además, es diferente al rol de la iglesia que recibe, pero para ambos tipos será un privilegio estar involucrados.
Antes de la salida al campo misionero
- Orar por el misionero(a) por nombre.
- Conocer sus preocupaciones, miedos, peticiones personales, familiares, etc.
- Nombrar a una persona de confianza encargada de escuchar y aconsejar al misionero (a) durante su tiempo de servicio.
- Designar a personas encargadas de orar por mes por el misionero(a).
- Colaborar económicamente en la medida de lo posible, así como la gira misionera para recolectar fondos.
*Nombrar a un coordinador de fondos local que tenga contacto con las personas comprometidas cada cierto tiempo a ofrendar.
Durante el tiempo de envío
- Orar por el misionero(a) y su familia.
- Hacer una gran celebración por el privilegio de enviar obreros de la casa a otras ciudades o naciones.
- Recolectar una ofrenda final para gastos del viaje, así como otros gastos posibles.
- Comprender su situación emocional de cambio en la adaptación en el nuevo lugar de servicio.
Durante el tiempo de servicio del misionero(a)
- Tener disposición para entender las diferencias culturales y de personalidad.
- Orar por sus ministerios, patrocinadores económicos, familias y aspectos personales (estudios, iglesias locales, pareja, entre otros).
- Aconsejar en diferentes aspectos que se enfrenten en ciertos momentos. Esto se puede hacer en días específicos de consejería, ya establecidos cada mes a través de video llamadas o conversaciones.
- Enviar tarjetas de cumpleaños, de saludo, de motivación; de forma virtual y a través del correo postal.
- Cumplir las promesas establecidas en cuanto a dinero. Mantener constante conocimiento de lo que esté viviendo el misionero(a) en cuanto a finanzas y saber cómo se puede colaborar.
Cuando el misionero(a) regrese a su país
- Orar por el choque cultural inverso que enfrentará al volver a su lugar de origen
- Dar apoyo sentimental y también espiritual en ese momento de separación y a la vez, unión
- Preparar una bienvenida para agradecer el servicio y la disposición a Dios.
Tutor/Consejero Designado – Distrito Enviador
Uno de los aspectos importantes para facilitar el Cuidado Integral de los Misioneros (as) en Génesis, es la necesidad de buscar una persona que colabore en la atención y consejería durante el tiempo de servicio misionero. Por lo tanto, es recomendable que el misionero (a) en apoyo con su superintendente puedan nombrar a esa persona antes de su salida del campo. Dicha persona, se sugiere que tenga el siguiente perfil:
- Madurez Espiritual: conocido por sus frutos del Espíritu, por sus habilidades de consejo, de pastoreo y de enfrentar situaciones difíciles de forma pacífica.
- Acercamiento con el misionero (a): es recomendable que la persona ya sea un modelo a seguir para el misionero (a), así no será algo difícil de iniciar, sino que será fluido y dará más fuerza al participante en sus conversaciones.
- Con disposición y responsabilidad: esta persona deberá cumplir con lo establecido con el misionero (a) en cuanto a las llamadas mensuales en asuntos como: horario, duración, frecuencia, entre otros. De modo que se cumpla el objetivo dado.
- Capaz de mantener la confidencialidad: muchos de los temas que va a tratar esta persona con el misionero (a) serán de carácter confidencial, no porque sean negativos, más bien por protección y mejor desempeño del trabajo realizado en el campo.
- Con acceso a la tecnología: esto abarata los costos y facilita la relación, de manera que pueda tener una video-llamada con el misionero (a) para dar seguimiento a sus emociones, salud y experiencias en el campo.
- NO es recomendable que sea alguien de la familia. Muchas veces los familiares verán con ojos de protección y eso puede provocar situaciones dolorosas en el campo, por lo tanto, es recomendable que la persona sea ajena, pero a la vez, sabia y capaz de dirigir y acompañar con los ojos de Cristo en este proceso.
Propósito:
El objetivo de esta relación “consejero-misionero” es que haya una persona de confianza con la cual el misionero (a) pueda contar para su mayor salud integral en el campo.
Actividades Esperadas del Mentor/Consejero:
- Una llamada mensual como mínimo
- Consejos sabios en cuanto a la transición, adaptación y separación
- Sabio manejo de los temas con familiares, pastores, líderes y personas cercanas al misionero (a) para su beneficio
- Cuando sean necesarios, trato adecuado de temas urgentes con líderes correctos, como por ejemplo: superintendente, personal de la oficina de Génesis, familiares, entre otros.